Berlín, Día 1- Curso 'The New Erasmus Program 2021-2017: Writing a successful Project for your school'
Mi primer día en Berlín amaneció muy frío, pero soleado.
Café en mano, me dirigí al centro donde tiene lugar mi curso. Al llegar, ¡tremenda sorpresa! Un montón de gente esperando para entrar y nadie para recibirnos... Al cabo de un rato llegan, sofocadas, las profesoras. Hay huelga de transportes en Berlín, comentan, y llegar a la escuela les ha supuesto una odisea. Después de mil perdones comienza la formación.
Hay dos cursos diferentes que se realizarán de forma simultánea, así que la presentación se lleva a cabo en gran grupo, para facilitar el acercamiento entre todos los asistentes en los momentos de descanso posteriores.
Después de la presentación nos dividimos y en mi curso quedamos cinco mujeres (dos rumanas, una portuguesa, otra española y yo) y la profesora (italiana). Una hora más tarde aparece la sexta participante: una griega que, por cortesía de la huelga, recorrió desorientada las estaciones de metro de medio Berlín. Juntas, participantes y profesora, formamos un fantástico mosaico de culturas.
La formación transcurre entre explicaciones, comentarios y aclaraciones. Y también dudas, muchas, no lo voy a negar.
El contenido del curso es denso y hay que ir despacio. Afinar bien desde el principio evitará futuros errores que conviene esquivar.
Con algunas cosas claras (y otras no tanto), nos despedimos hasta el día siguiente.
La tarde libre decido dedicarla a pasear por la East Side Gallery, de obligada visita si estás en Berlín. Se trata del único fragmento del antiguo Muro que sigue en pie. En 1990 lo convirtieron en un gran fresco y diferentes artistas de diversos países plasmaron allí sus creaciones.
Ante el muro, es inevitable reflexionar sobre el sinsentido que supuso su levantamiento para separar familias y amigos y causar tanto daño.
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